La diabetes y la hipertensión arterial son las dos causas más comunes de enfermedad renal crónica (ERC). Si usted padece uno de estos problemas, debería estar bajo cuidado médico porque un control cuidadoso de la presión arterial y la concentración sanguínea de azúcar, una dieta baja en proteínas y una reducción del peso corporal pueden disminuir notablemente o inclusive prevenir el desarrollo de la enfermedad renal crónica.
La enfermedad renal crónica, además, puede no producir dolor ni malestar, y en muchos casos no se tendrá sensación de enfermedad, incluso aunque se haya perdido gran parte de la función renal. Sin embargo, la labor de seguimiento en las consultas de nefrología puede retrasar mucho la progresión de la enfermedad, llegando a frenarla en algunos procesos si se actúa al principio.
Por tanto, podríamos decir que las medidas a llevar a cabo para prevenir la ERC son:
– Consulte a su médico regularmente, especialmente si tiene diabetes o presión arterial alta. Mantener su diabetes y la presión arterial bajo control puede ayudarle a prevenir la enfermedad renal o a demorarla.
– Deje de fumar. Fumar hace que la enfermedad renal empeore más rápidamente.
– Reduzca el consumo de alcohol.
– Modere la ingesta de sal para el control de la hipertensión.
– Mantenga una dieta equilibrada.
– Realice ejercicio físico moderado.
– Trabaje con su médico y equipo de atención de la salud. Cuénteles si hay algún cambio en su salud.
– Cumpla con todos los medicamentos y los cambios en la dieta que prescribe su médico.
– Tenga un rol activo en el cuidado de su salud. Infórmese sobre la enfermedad renal y sus tratamientos.